María Díaz espera reacción positiva luego de la transfusión de plasma

La merenguera de música típica María Díaz espera la reacción positiva a la terapia de transfusión de plasma a que fue sometida la noche del lunes para combatir la Covid-19 que la tiene interna en la clínica Unión Médica del Norte, en Santiago de los Caballeros.

"Hasta hoy ha estado mejorando mucho, su cuadro es delicado, pero no es de gravedad, anoche conseguimos el donante y ya se lo pusieron plasma y ahora estamos esperando la reacción positiva", dijo a LISTÍN DIARIO la representante de la artista, Alba Iris García.

María Díaz, interna desde el pasado fin de semana, tiene oxígeno permanente, pero no en cuidados intensivos, aclaró Alba Iris, quien agradeció el interés de los seguidores de la merenguera.

El tratamiento al que fue sometida la músico y cantante, donado por un paciente que ya padeció el coronavirus, tiene como objetivo crear anticuerpos.

El plasma es el suero o porción líquida que queda después de que se hayan removido los glóbulos rojos, las plaquetas y otros componentes celulares de la sangre.

Este líquido contiene agua, sales, anticuerpos y otras proteínas y usualmente se utiliza en terapias para personas con deficiencias del sistema inmune, hemofilia o que hayan sufrido traumas como quemaduras o mordeduras de animales con rabia.

Antes de que se descubrieran los antibióticos, el plasma también era un tratamiento común para combatir infecciones bacteriales.

Hay registros de que durante la pandemia de gripe de 1918, más de 1,700 personas recibieron transfusiones de plasma, pero es difícil determinar qué tan efectivas fueron con base en los estándares de la medicina de hoy, anota el portal de la BBC de Londres.

+ De su carrera

María Díaz, de 51 años y nativa de El Guayano de Nagua, tiene desde niña tocando el acordeón porque se inspiraba en su padre, que tocaba el instrumento y siendo solo una niña formaba un conjunto de niños junto a su hermano Alejandro en la güira y su primo Kennedy en la tambora.

Ella se presentaba con un acordeón que parecía más grande que ella, y de esta manera adquirió la destreza para tocarlo.

Cuando era adolescente emigró a la ciudad de New York, donde empezó su carrera musical, en la que es conocida como "La reyna del merengue típico".

Tiempo después de residir en Nueva York regreso al país, donde ha desarrollado una carrera activa con temas como "La vejez no tiene remedio", "Por qué te fuiste dulce amor", "La chiflera", "Se fue llorando", "La torera", "El pobre Maelo", "Cumandé", "De palo pa´ leña" y muchos más.